Solución para los antojos; Mug Cakes de chocolate y café

La verdad, es que soy muy de antojos y además, a horas intempestivas, así que cuando descubrí que se habían puesto de moda estos bizcochitos, vi el cielo abierto. Aunque he de decir, que soy más de salado que de dulce, hay veces que siento un deseo irrefrenable por comer algo azucarado, y sobre todo chocolate, así que esto, unido a la rapidez de preparación, ha hecho de los mug cakes, uno de mis dulces favoritos.

Aún recuerdo la cara de asombro de Dani, la primera vez que, en el descanso de una película, me levanté un momento a la cocina y volví con un bizcocho recién hecho -los ojos se le salían- además, como está acostumbrado al sonido del microondas, debido a los mil cafés que me preparo al día, tampoco le extrañó mucho, oírlo a la 1 de la madrugada.

Vamos con la preparación:

Ingredientes:

2 cucharadas de aceite de girasol

1 huevo

6 cucharadas de azúcar blanco

3 cucharadas de leche

2 cucharadas de cacao puro en polvo

4 cucharadas de harina de trigo

½ cucharadita de levadura

Azúcar glas para decorar.

Pasos a seguir:

Mi consejo; yo normalmente hago la masa en un recipiente a parte y luego relleno las tazas, me encuentro así más cómoda al mezclar los ingredientes, aunque recuerda que puedes hacer la mezcla directamente en la taza.

Como es importante que la masa sea homogénea, uniremos primero los ingredientes húmedos, y después iremos añadiendo los secos.

1. Batiremos bien el huevo (truquillo… añádele una pizca de sal), junto con el aceite y la leche.

2. Ahora vamos con los ingredientes secos… añadimos el azúcar, la harina, la levadura y el cacao. Entre cucharada y cucharada, mezclaremos bien los ingredientes, para evitar así que nos queden grumos.

3. Verteremos la masa en la taza, sobrepasando un poquito la mitad de la misma (nunca la llenaremos hasta arriba, ya que la mezcla subirá bastante durante la cocción).

4. Metemos la taza con la mezcla en el microondas 1 minuto y medio a potencia máxima.

Y voilá!!!!!

Ya tienes un delicioso bizcocho de chocolate recién hecho, para satisfacer esos antojos que vienen sin avisar.

Y sin avisar, hay veces que se presenta visita en casa, así que – para adictos al café como yo – quedarás genial preparando un mug cake de café, simplemente eliminando la leche y sustituyendo el cacao por 6 cucharadas de café.

…y ya tienes una deliciosa…

Nota: Aunque la repostería es casi una ciencia exacta, precisamente los mug cakes no lo son, y más aún, cuando hablamos de cucharadas y no de gramos, además su consecución depende de muchos factores… simplemente la propia forma de la taza, o la diferencia entre unos microondas y otros, hace que no siempre salgan igual, pero esto no es un problema, te garantizo que siempre salen deliciosos, eso sí, como en todo, la experiencia es un grado… No te preocupes por añadir una cucharada más de azúcar o por incluir pepitas de chocolate a la masa, HAZLOS, INVESTIGA, PRUEBA…solo así le pillarás el punto a tus mug cakes, y los harás como a ti te gusten. Por ejemplo, en mi microondas, el tiempo es 1 minuto y medio, pero en otros pueden ser hasta 3 minutos. Es más, si quiero que en el fondo de la taza me quede el chocolate fundido, que me encanta, debo ponerlo 1 minuto y 20 segundos. Mi consejo, pon 1 minuto y ve mirando y añadiendo segundos poco a poco, para evitar así pasarte de tiempo y que te quede seco.

Acuérdate: los mug cakes, son para consumirlos recién hechos, no sirve hacerlos por la mañana para comerlos por la tarde, ya que habrán perdido su esponjosidad y suavidad y con toda probabilidad, habrán endurecido. Son de hacer y comer.

Truco: pon la taza en el borde del plato del microondas, con el asa hacia afuera, y durante el minuto vigila, y cuando empiece a subir la masa, si ves que sube más de un lado que de otro, abre la puerta y cambia la dirección del asa hacia adentro, esto hará que suba por ambos lados por igual.

Recuerda: aunque los mug cake son un postre delicioso, hay gustos para todo. Encontramos personas que son auténticas fanáticas de este bizcochito y otras que aún no les ha cogido el punto. No debemos olvidar que no estamos hablando de alta repostería, sino de un dulce rápido y fácil, que nos soluciona visitas imprevistas y antojos a horas inadecuadas.